La Dra. Nelva Ortega alerta a la cmunidad internacional sobre situación de su esposo, el prisionero político José Daniel Ferrer Compartir
«Continúa sobreviviendo en condiciones crueles, inhumanas y degradantes, hacinado junto a los mismos delincuentes al servicio de la dictadura, en medio de chinches, mosquitos y moscas», precisó su hermana, Ana Belkis Ferrer.
La doctora Nelva Ismaray Ortega Tamayo, esposa del prisionero político cubano José Daniel Ferrer, logró verlo en la cárcel luego de varios días exigiendo al régimen de La Habana prueba de vida del líder opositor.
«Aproximadamente a las 4:00 pm de este lunes dieron FE DE VIDA de Ferrer», dijo en redes sociales su hermana, Ana Belkis Ferrer y aclaró que las autoridades del penal solo le permitieron verlo «bajo la presencia del represor del G2 conocido como Julio Fonseca».
«Durante el encuentro, de aproximadamente una hora, confirmó que todo continúa igual excepto las salvajes golpizas y las torturas extremas, las cuales de momento recesaron», agregó.
El líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) fue víctima de al menos siete golpizas severas en las últimas semanas mientras realizaba una huelga de hambre, que mantuvo por 14 días.
«Continúa sobreviviendo en condiciones crueles, inhumanas y degradantes, hacinado junto a los mismos delincuentes al servicio de la dictadura, en medio de chinches, mosquitos y moscas, con ambos oídos reventados, fuertes dolores de cabeza, tos, dolor de garganta, dolores musculares y articulares», explicó Ana Belkis.
Aproximadamente a las 4:00 pm de este Lunes, 14 de Julio del 2025 dieron FE DE VIDA de #SOSFerrer, solo a Nelva Ismarays Ortega-Tamayo le permitieron verlo y bajo la presencia del represor del G2 conocido como Julio Fonseca.
Durante el encuentro de aproximadamente una hora confirmó que todo continúa igual excepto las salvajes golpizas y las torturas extremas, las cuales de momento recesaron.
Continúa sobreviviendo en condiciones crueles, inhumanas y degradantes, hacinado junto a los mismos delincuentes al servicio de la dictadura, en medio de chinches, mosquitos y moscas, con ambos oídos reventados, fuertes dolores de cabeza, tos, dolor de garganta, dolores musculares y articulares, y sin atención médica, así como obligado a tomar agua sucia y contaminada al no permitir la entrada de agua purificada.
JUSTICIA, LIBERTAD Y VIDA PARA TODOS LOS DETENIDOS Y PRESOS POLÍTICOS.
ABAJO LA DICTADURA CASTRO CANEL COMUNISTA.

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