El preso político cubano Silverio Portal Contreras fue sometido a numerosos exámenes médicos durante nueve días de ingreso en el Hospital Nacional, durante los que estuvo rodeado de agentes de la Seguridad del Estado que hicieron imposible la comunicación con su familia. Así informó a DIARIO DE CUBA su esposa Lucinda Gómez González, quien habló con su esposo el lunes en la tarde.

“Me hicieron pruebas hasta del pelo”, le dijo Portal Contreras a Gómez en una llamada telefónica que le hizo ya desde la cárcel 1580, de San Miguel del Padrón, en La Habana, donde fue conducido a una “compañía de aislados” sin conocer las razones del cambio.

“Tú no eres capaz de imaginarte la cantidad de agentes de la Seguridad del Estado que había (…) Me hicieron pruebas hasta del pelo, del corazón, de la vista”, se escucha en la conversación grabada por Gómez y compartida con DIARIO DE CUBA.

“Tengo cataratas y producto de la presión alta tengo afectada la vista”, añadió Portal.

Gómez González, que no sabe cuándo podrá visitar a Portal, denunció que hay “secretismo” alrededor de la salud de su esposo y se mostró angustiada y temerosa por su vida.

“A él explicaron que tenía problemas en el corazón, que estaba crecido el problema de la presión, la catarata, se está quedando ciego, pero diagnóstico a él no le van a dar ninguno. Esto es otra maniobra de la Seguridad del Estado, de estos esbirros”, dijo Gómez a DIARIO DE CUBA.

En dos años y medio de encarcelación Silverio Portal Contreras ha visto agravadas la epilepsia y la hipertensión que padecía antes, con un infarto cerebrovascular, dos isquemias transitorias, la pérdida de la visión de un ojo tras una golpiza y la pérdida progresiva de la visión del otro tras diagnosticársele diabetes.

El opositor fue condenado en 2018 a cuatro años de prisión por los presuntos delitos de desorden público y desacato, tras protestar pacíficamente en el Parque Central de la capital cubana.

Numerosos organismos internacionales han pedido la liberación de Silverio Portal: el Parlamento Europeo, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y Amnistía Internacional, que lo declaró prisionero de conciencia en 2019.

Además de los recursos legales que posibilita la legislación cubana, se le entregó al Tribunal Supremo una petición de liberación con más de 5.000 firmas recogidas a través de la plataforma Change y se recogieron más de 3.000 firmas más, puerta a puerta, en medio de la restricción de movimiento debido a la crisis sanitaria provocada por el Covid-19.

Por quinta vez este año, la esposa del preso político entregó en octubre en las oficinas de Atención a la Población del Consejo de Estado una solicitud de indulto dirigida a Miguel Díaz-Canel a favor de su esposo.