Freedom House otorgó a Maykel Castillo Pérez “Osorbo” y Luis Manuel Otero Alcántara, del Movimiento San Isidro (MSI) de Cuba, su Premio de la Libertad 2022, en reconocimiento a su activismo bajo un régimen represivo que hoy los mantiene tras las rejas.
La organización también concedió su Premio al Liderazgo a Carl Gershman, presidente fundador de National Endowment for Democracy (NED), quien dirigió la organización durante casi 40 años, de acuerdo con un comunicado de prensa de la organización internacional de derechos humanos.
Los homenajeados recibirán los premios este miércoles en la Cena Anual de Premios 2022 de Freedom House en el Hotel Mayflower en Washington.
El premio otorgado a Otero Alcántara y Castillo Pérez será recibido por Anamely Ramos, profesora, curadora de arte y defensora de los derechos culturales en Cuba, quien colaboró con el MSI en campañas para promover la libertad de expresión y contrarrestar la censura.
“Mientras enfrentamos enormes desafíos para la libertad en todo el mundo, es un honor celebrar el increíble coraje de los galardonados de este año para hacer frente a la tiranía“, dijo Michael J. Abramowitz, presidente de Freedom House.
“A pesar de la represión y los reveses, el deseo humano de libertad se fortalece cada vez más. Sus campeones en todo el mundo, como Maykel, Luis Manuel y sus valientes compatriotas que el año pasado protagonizaron la mayor manifestación a favor de la democracia en Cuba desde 1959, necesitan el apoyo de los poderes democráticos y las organizaciones internacionales si quieren prevalecer”, añadió.
“Freedom House expresa su solidaridad con el pueblo cubano, apoyando su búsqueda de la libertad durante el tiempo que sea necesario para lograr los derechos y libertades que todas las personas merecen“, afirmó.
“También estoy encantado de que Freedom House honre a Carl Gershman, un incansable y feroz defensor de la libertad”, continuó Abramowitz.
Explicó que “bajo su liderazgo, National Endowment for Democracy se ha convertido en un poderoso baluarte de apoyo para los defensores de los derechos humanos y otros activistas que luchan por la libertad en todo el mundo, y un símbolo del compromiso bipartidista de los estadounidenses con la causa de la democracia global”.
A inicios de abril, Luis Manuel Otero Alcántara sufrió una parálisis y tuvo que ser trasladado con urgencia a un hospital durante su última huelga de hambre en la prisión. Comenzó a presentar problemas en los ojos, como secuela de la protesta. El artivista ha mantenido varias huelgas de hambre en los últimos tiempos que han hecho mella en su organismo y el estado de su salud.
La Fiscalía del régimen solicitó una pena de prisión de siete años para él, por intentar participar en las protestas del 11J en La Habana. El artivista se encuentra preso desde entonces.
Aunque decenas de cubanos encarcelados durante y después de las manifestaciones ya han sido juzgados, él continúa recluido sin fecha de juicio, al igual que Maykel “Osorbo”.
Castillo Pérez, por su parte, para quien el régimen solicitó diez años de privación de libertad, también Maykel Osorbo viene presentando problemas de salud en prisión. “Hace meses comenzó a fallarle el sistema linfático y no tiene un diagnóstico conclusivo, ni tratamiento. Tampoco tiene, dentro de una cárcel cubana, acceso a un diagnóstico confiable“, denunció la activista Anamely Ramos a inicios de marzo.
A fines de octubre, el MSI denunció que el régimen condiciona la liberación de “Osorbo” y Otero Alcántara a su abandono definitivo del país, algo a lo que ambos se resisten.
Fuente Diario de Cuba.
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