UN GUSANO SE ATREVE A RETAR AL RÉGIMEN.
Vamos a suponer, no se pongan nerviosos sin leer todo lo que voy a escribir, que el partido comunista cubano es la garantía de igualdad, prosperidad, felicidad y libertad de unos bendecidos habitantes de la isla, ciudadanos respetados, educados, dignos, alimentados y sanos. Vamos a suponer que el partido comunista cubano es observado por todos los ciudadanos, generación tras generación, como la salvaguarda de seguridad personal y familiar que impide por voluntad propia a nadie plantearse marchar, proferir el menor comentario desaprobatorio o incumplir ninguna de sus leyes que han demostrado repetidamente que van exclusivamente dirigidas a mejorar la vida de los cubanos hasta instalarlos en zonas de confort y progreso sólo reservadas a los habitantes de las naciones más desarrolladas. Vamos a suponer todo eso. Y vamos a suponer también que todos los cubanos que están afuera salieron porque son unos malnacidos, desagradecidos, egoístas y traidores a la patria. Vamos a suponer que los millones de cubanos adentro están locos de contentos con el partido que hay y los millones de cubanos afuera son unos gusanos arrastrados a los que el futuro de nuestra patria no les interesa porque voluntariamente decidieron hacerse noruegos, escoceses o cameruneses, sin haber sabido nunca apreciar lo que nuestros iluminados gobernantes han logrado alcanzar para todos nosotros. Está bien. Entonces yo quiero que los dirigentes de ese partido respondan a este arrastrado gusano por qué no dejan a nadie presentarse a unas elecciones a competir en igualdad de condiciones y así demostrar al mundo que el partido comunista cubano es capaz de aplastar a este mísero gusano a base de hechos, razones, argumentos, logros, sueños, resultados… y votos emitidos en libertad. Este gusano infecto sabrá reconocer su error si es derrotado en igualdad de condiciones y respetará al partido comunista como un foco de democracia contrastada y demostrada. Si después de ser derrotado en igualdad de oportunidades el partido comunista vencedor decide encerrar a este gusano de por vida, este gusano aceptará de buen grado esta decisión, comprendiendo que donde mejor puede estar un gusano perdedor y revoltoso es en un agujero desde el que no pueda continuar interfiriendo la velocidad vertiginosa que la isla lleva en términos de crecimiento y desarrollo desde que estas preclaras mentes se pusieron al frente del grandioso proyecto revolucionario. Que acepten el reto de este gusano y si vencen, que me aplasten.
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