September 21, 2024

Cuba tendrá presidente de la República en octubre y recortará aparato de gobierno

Cuba tendrá presidente de la República en octubre y recortará aparato de gobierno

junio 20, 2019

La Asamblea pasará de 605 a 474 diputados, mientras el Consejo disminuirá de 31 a 21 sus miembros.Compartir

Cuba tendrá un presidente de la República y un primer ministro en octubre, después de 43 años, y reducirá notablemente los miembros de sus órganos legislativos y ejecutivos.

Según un proyecto de ley electoral publicado este jueves, que será votado en julio, la Asamblea Nacional (Parlamento), órgano ejecutivo y legislativo del país, tendrá un 21,6% menos de miembros, mientras que el Consejo de Estado, actualmente presidido por Miguel Díaz-Canel, principal figura del poder ejecutivo, perderá casi una tercera parte de sus miembros.

Cuba cambió su estructura de gobierno en 1976, al aprobar su primera Constitución socialista, adoptando el denominado Poder Popular, con lo que desaparecieron los cargos de presidente de la República y de primer ministro.

La Asamblea pasó a ser el principal órgano de gobierno y legislativo del país que se reúne dos veces al año. El resto del tiempo, el Consejo de Estado asume sus competencias.

“Habrá que elegir al presidente de la República en octubre. En julio discutimos la ley, en octubre empezamos a dar los primeros pasos” para la restructuración del aparato gubernamental, dijo el presidente del Parlamento, Esteban Lazo, en un video difundido por ese órgano.

La Asamblea pasará de 605 a 474 diputados, mientras el Consejo disminuirá de 31 a 21 sus miembros. Ambos ostentarán el poder legislativo, mientras que el ejecutivo recaerá en la figura del primer ministro y el presidente será el representante del Estado.

El fallecido líder Fidel Castro (1926-2016) fue primer ministro de Cuba de 1959 a 1976, y después de la Constitución socialista pasó a ocupar el cargo de presidente del Consejo de Estado desde 1976 a 2008, sustituido hasta 2018 por su hermano Raúl. Díaz-Canel tomó posesión del puesto en 2018.

Según el proyecto de Ley Electoral, el presidente y vicepresidente de la República serán elegidos entre los diputados de la Asamblea Nacional y a propuesta de estos para un mandato de cinco años y un máximo de dos períodos.

El cargo de primer ministro será nombrado por el presidente y tendrá que ser ratificado por la Asamblea, que mantendrá su composición hasta el final de esta legislatura, en 2024.

“La actual composición de la Asamblea, con 605 diputados, se mantendrá hasta concluir la presente legislatura. Los cambios propuestos para ese órgano comenzarán a regir con un nuevo mandato dentro de cinco años”, dijo Lazo, citado por el diario oficial Granma.

El proyecto de Ley Electoral fue publicado en el sitio en internet del Parlamento, y será estudiado por los diputados y discutido en reuniones provinciales entre el 21 y el 26 de junio, para luego aprobarlo en la primera sesión anual de ese órgano, en julio.

La Asamblea habilitó una dirección de correo electrónico “para que los ciudadanos que lo deseen envíen sus opiniones, las que serán adecuadamente valoradas”.

La Ley Electoral aprobada con la nueva Constitución prevé la unificación de los cargos de presidente de la Asamblea y el Consejo de Estado.

Sin pena ni gloria, sin sustos ni fiestas

Nadie espera nada extraordinario de la Asamblea convocada el próximo día 10 para nombrar al Presidente de la República

REINALDO ESCOBAR, La Habana | Septiembre 30, 2019

Los diputados tendrán unos pocos minutos, como mucho un par de horas, para decidir; aunque les bastará. (EFE)

TEMAS

Miguel Díaz-CanelCubapresidencia de la RepúblicaAsamblea del Poder Popular

Como si estuvieran dando una noticia, este lunes los medios oficiales anunciaron finalmente que el Consejo de Estado de la República de Cuba dispuso la celebración de una Sesión extraordinaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular para el próximo 10 de octubre a las 10:00 en el Palacio de las Convenciones para elegir al presidente y al vicepresidente de la República, además de a los tres máximos cargos del Parlamento -presidente, vicepresidente y secretario- y los restantes miembros del Consejo de Estado.

Los casi nueve millones de ciudadanos con derecho al voto en Cuba desconocen todavía los nombres que aparecerán en la lista confeccionada por la Comisión Nacional de Candidaturas. Ni falta que les hace, porque los que marcarán una cruz junto a cada nombre escrito en la boleta serán los diputados del Parlamento.

Debe advertirse que no tendrán que elegir a su preferido entre varios candidatos, sino solo aprobar los que aparecen en la lista

Ni siquiera a estos se les ha develado el misterio y para tomar su decisión solo contarán con los minutos, a lo sumo un par de horas, que medien entre el momento que se les entregue la boleta y el solemne acto de depositarla en la urna. Debe advertirse que no tendrán que elegir a su preferido entre varios candidatos, sino solo aprobar los que aparecen en la lista.

Saben que no deben demorarse demasiado dentro del espacio donde cumplirán sus obligaciones electorales, en una supuesta intimidad. La lealtad y la disciplina forman parte de los méritos que los llevaron a ocupar un escaño en la ANPP y este es uno de esos actos donde se pondrá a prueba su obediencia. Si hubiera una casilla única para marcar su aceptación por todos la escogerían como opción “patriótica, revolucionaria, de continuidad”.

Se puede apostar que quien resultará elegido presidente de la República será Miguel Díaz-Canel. Si esta decisión se tomara en una democracia, los analistas políticos estarían sopesando los efectos positivos de la reciente subida de salarios con las negativas consecuencias de la actual coyuntura energética que amenaza con paralizar el país.

En cualquier nación donde los electores eligen a su presidente las posibilidades de éxito de los candidatos se miden por sus éxitos y sus fracasos y por la credibilidad que merezcan a sus votantes. En Cuba resulta difícil, incluso, especular, porque todo puede depender del estado de ánimo de un anciano que tiene el poder de cambiarlo todo en el último minuto.

En medio de la incertidumbre en que vive una población en la que nadie sabe si mañana su centro de trabajo continuará funcionando, qué mercancías desaparecerán, qué rutas de ómnibus dejarán de circular ni cuántas horas durará el servicio eléctrico en los hogares es probable que esta convocatoria a una sesión especial del parlamento pase sin pena ni gloria, sin sustos ni fiestas.

En cualquier nación donde los electores eligen a su presidente las posibilidades de éxito de los candidatos se miden por sus éxitos y sus fracasos y por la credibilidad que merezcan a sus votantes

Los pocos interesados en el tema se inclinan a barajar nombres para los cargos de vicepresidente de la República y al frente de la ANPP. Esperan que Esteban Lazo pase a retiro y que figuras que se han destacado en los últimos tiempos sean ascendidas, como es el caso de Homero Acosta, Mercedes López Acea e Inés María Chapman. Otros se preguntan cómo quedarán en esta redistribución de poderes personajes como Marino Murillo, Roberto Morales Ojeda o Salvador Valdés Mesa, pero estas disquisiciones no son otra cosa que entretenimientos para entendidos.

Si el próximo 10 de octubre nos enteramos de que los cargos “en disputa” serán ocupados por otros desconocidos, tampoco nadie se sentirá sorprendido… ¿a quién le importa el resultado de esta puesta en escena?

Publicado el Miércoles, 28 Agosto, 2019 – 07:48 (GMT-5) [email protected]