Los miembros de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba (ANEC) presentaron a Miguel Díaz-Canel propuestas para la renovación de la economía estatal cubana que incluyen contenidos para una futura Ley de Empresas en la Isla.

Las sugerencias responden a una solicitud expresa del Gobierno, y van desde separar las funciones estatales y empresariales y descentralizar el comercio exterior, hasta crear mayores incentivos financieros para la exportación y la sustitución de importaciones, según el reporte del semanario oficial Trabajadores.

Los economistas oficialistas también propusieron cambios en el sistema bancario que favorezcan un mayor acompañamiento de las empresas, relaciones transparentes y legítimas entre todos los actores económicos, además de una política más específica para seleccionar, formar y estimular a los directivos como hombres de negocio con competencias profesionales.

Los expertos también invitaron al rediseño del sistema de indicadores para evaluar el cumplimiento del plan de cada empresa, con más énfasis en la gestión. A través de ello, buscan promover mayor autonomía empresarial, que las entidades puedan escoger su modelo de gestión, definir sus proveedores y clientes, precios, salarios y cargos propios, sin un calificador fijo.

También abogaron por una mayor capacidad para estimular a los trabajadores, así como para manejar los recursos financieros, las reservas voluntarias y los procesos inversionistas.

Otras sugerencias versan sobre aprobar mayores incentivos a la innovación y creación de espacios de experimentación gerencial, junto con estructuras diferentes por sectores, y una revisión de los criterios para agrupar empresas, constituirlas o considerarlas unidades empresariales de base, así como estudiar actividades estatales que puedan pasar a otras formas de gestión.

Las propuestas, formuladas por una veintena de investigadores y directivos de empresas, “parten de un estudio sobre las trabas que enfrenta la empresa estatal socialista y sus posibles soluciones”, asegura el reporte.

El Doctor Francisco Borrás, uno de los autores de las propuestas, dijo que Díaz-Canel opinó que el estudio permite “ordenar el pensamiento” sobre asuntos que afectan el desempeño empresarial, y pidió “profundizar en varias definiciones conceptuales y precisar aún más” cómo “destrabar” la gestión económica de las entidades.

El economista cubano Pedro Monreal calificó como “bienvenida” la propuesta, pero cuestionó que “en un tema crucial como es ‘el entorno empresarial’ la propuesta no parezca abordar la reforma de la planificación centralizada.”

“La ausencia de referencias al posible reemplazo del esquema de planificación centralizada quizás sea un problema de la nota periodística, pero, en el fondo, el margen de acción empresarial depende del esquema de planificación”, advirtió, en una cadena de comentarios en su perfil en Twitter.

“Una de las lecciones de otros procesos de reformas de modelos de planificación centralizada es el fracaso de la tentación de pensar que mejoras técnicas de gestión permitían evadir la necesidad de reformas fundamentales en el modelo”, recordó.

Acerca del término “destrabar”, que Díaz-Canel utiliza frecuentemente como incitación para hacer cambios económicos, Monreal señaló que este “pudiera evocar una especie de visión ‘ingenieril’ de la economía: engranajes específicos atascados. Reformar un modelo de planificación centralizada necesita una visión de ‘complejidad’: procesos cuyos componentes interactúan de manera cambiante e impredecible”.

Díaz-Canel ha dicho que 2020 tiene que ser el año en que se proponga “todo lo que sea necesario implementar para desatar las fuerzas productivas”, pero advirtió también que ello “no se puede confundir con privatización, pues ese no es nuestro camino.”

Mientras la Isla atraviesa una de las crisis económicas más profundas de los últimos 20 años, con una disminución de los ingresos del turismo y de las “misiones médicas” en el exterior, dos de las principales fuentes de recursos del Gobierno, el gobernante ha estado repitiendo que es necesario “desatar las fuerzas productivas” sin mencionar cuáles serían las medidas para lograrlo.

En cambio, desde el inicio de su gestión se han incrementado las trabas para el funcionamiento de la economía privada.