MIAMI, Estados Unidos. – Más de 7 000 personas ya han firmado la petición del Movimiento Cristiano Liberación (MCL) para que la Organización de Naciones Unidas (ONU) investigue la muerte de los activistas cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero, fallecidos en julio de 2012.

La campaña, desarrollada a través de la plataforma change.org, pide a la Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, que interceda para que las familias de Payá y de Cepero puedan acceder a la información del caso, silenciado por las autoridades cubanas.

“Ruego a usted, honorable Alta Comisionada, que interceda con el Estado de Cuba para lograr en primer término que la familia pueda acceder a las actas procesales, evidencias del caso y, de igual forma, se realice una investigación transparente, objetiva e imparcial de los hechos y circunstancias, en donde participen expertos internacionales y expertos designados por la familia. Esta sería la única forma de llegar a la verdad por las vías jurídicas idóneas y confiables”, señala la misiva, firmada por Carlos Payá, hermano del fallecido opositor, representante.

En declaraciones a Radio Televisión Martí, Payá señaló que la petición se entregó de manera formal a Bachelet en noviembre de 2018. Sin embargo, hasta el momento no ha recibido “ningún tipo de contestación”.

“Se hizo (la entrega) de manera formal en noviembre del 2018. En Ginebra, se envió por el conducto reglamentario a la Alta Comisionada y también se le entregó en mano”, dijo Carlos Payá.

Pese a ello, el opositor resaltó la importancia de la campaña, que cada vez cuenta con más firmantes dentro y fuera de Cuba.

“La campaña de recogida de firmas ha ido avanzando. Ahora mismo tenemos 7 300 firmas (recogidas en la Internet) y un número importante que, por discreción, no puedo dar que se han recogido a mano dentro de Cuba”, agregó.

En la misiva enviada a Bachelet, el activista sostiene que el derecho de la familias de los fallecidos a un debido proceso ha sido vulnerado e insistió en que existen evidencias de inconsistencias en el reporte del supuesto accidente de tránsito que acabó con la vida de Payá y Cepero.

“Nuestro derecho al debido proceso ha sido conculcado y consecuentemente nuestro derecho a la verdad. El tiempo ha transcurrido y tenemos que vivir con la idea fija de las diversas hipótesis existentes de la causa de la muerte de Oswaldo y de las inconsistencias y contradicciones de la versión oficial”, expresa la petición.

Oswaldo Payá y Harold Cepero fallecieron en extrañas circunstancias el 22 de julio de 2012, tras un accidente de tránsito ocurrido en Granma.

Ambos activistas viajaban en un vehículo conducido por el político español Ángel Carromero, cuando el vehículo fue presuntamente embestido por otro carro que lo obligó a salirse de la carretera.

En el vehículo accidentado también se se encontraba el ciudadano sueco Jens Aron Modig, entonces presidente de las Juventudes Cristianas Demócratas (KDU).

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